Representantes de sindicatos de trabajadores docentes del sector universitario latinoamericano participaron de un encuentro online junto al director del Instituto Internacional de la UNESCO para la Educación Superior en América Latina y el Caribe (IESALC-UNESCO), Francesc Pedró, con el fin de evaluar los efectos de la pandemia COVID19 en el sistema educativo universitario, incluyendo la calidad académica y la situación laboral de quienes lo integran.
Organizado por la Federación de Sindicatos de Docentes Universitarios de América del Sur (FESIDUAS), y la Federación de Sindicatos de Trabajadores Universitarios de Centroamérica, México y el Caribe (FESITRAUCAMC), el evento convocó, además del IESALC-UNESCO, a la Confederación de Educadores de las Américas (CEA).
Reunidos en la virtualidad a la que nos confina la pandemia, los dirigentes regionales expusieron las dificultades que atraviesa la comunidad educativa de cada país, y en especial los trabajadores, en el marco de la emergencia sanitaria por la que atraviesa el mundo. Además, se dialogó sobre las principales acciones que deberán llevar adelante una vez pasada la pandemia.
La apertura y la moderación del coloquio estuvo a cargo del secretario de Comunicación de la FESIDUAS, Marcelo Magnasco, quien luego de dar la bienvenida a los casi cien dirigentes sindicales presentes, estableció los lineamientos de la reunión.
El primero en tomar la palabra fue el presidente de la FESIDUAS y titular de la Federación de Docentes de las Universidades (FEDUN), Daniel Ricci, quien brevemente repasó las complejidades implicadas en la adaptación en la urgencia lo presencial a la virtual.
“La gran preocupación que tenemos es cómo mantener la calidad educativa, junto a niveles importantes de inclusión social -dado que la virtualidad afecta seriamente a los estudiantes con menores recursos- y los derechos de los trabajadores docentes”, explicó Ricci.
En este sentido, resaltó no solo “el gran esfuerzo que vienen llevando adelante los docentes universitarios de la región, sino también la necesidad de defender sus derechos laborales”, trastocados en este nuevo contexto.
Luego fue el turno del principal orador, Francesc Pedró, director del Iesalc-Unesco, quien presentó un informe con seis “macrotendencias” en torno a los efectos de la pandemia para tener en cuenta “más allá de la continuidad pedagógica” a la hora de reemprender las labores docentes.
El primer punto fue la evolución de la demanda. “Estamos teniendo pérdidas de estudiantes por diversos factores: Falta de conexión o imposibilidad económica. Las familias no pueden mantener un hijo en la universidad”, y sumó a este punto una “brecha marcada en cuanto a género”.
Luego en segunda instancia, se refirió a una constante que se da luego de las crisis del tipo de las que sin dudas dejará el COVID. Luego de estos períodos “los jóvenes intentan volver (a las universidades). Esto se nota en cada crisis. El mercado no ofrece oportunidades, y se busca el refugio en la universidad para ganar valor, y posicionarse en el mercado.
A continuación, como tercer y cuarto punto presentó dos variables que se condicionan entre sí. Se trata de “la reducción de los aranceles, que va del 10 % al 50%”, y el aumento de la los despido en el sector, ante la baja demanda. Esta problemática, si bien se da manera diferenciada, es común a toda la región.
El punto número cinco es un problema que deriva de la modificación del modo de trabajar de los docentes, y Pedró lo denominó “Proletarización de la docencia”. “En este contexto, uno trabaja mucho más que antes, y las normativas no se ajustan”. Esto está generando en toda la región fuertes debates tanto a niveles locales como regionales.
Por último, Pedró abordó los problemas de financiamiento, y estimó que dadas las circunstancia que se esperan “la Educación superior no será en el presupuesto de los Estados. Primero, en todo caso, vendrá la educación escolar”. Por eso instó a generar consensos y discursos que sostengan en la agenda social y política la importancia de la educación superior para “mantener la cohesión y la movilidad social”.
A continuación, tomó la palabra Agustín Rodríguez Fuentes, secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (STUNAM), presidente del Colegiado Unión Nacional de Trabajadores (México) y presidente de la Confederación de Trabajadores y Trabajadoras de las Universidades de las Américas (CONTUA), y abordó la necesidad de planificar antes del retorno a clases, la adaptación a condiciones laborales inéditas.
Sostuvo que los sindicatos universitarios deben ubicarse en la delantera de la defensa de los derechos laborales, de la mano de una revalorización de las universidades públicas, colocándolas como uno de los objetivos integrales fundamentales del desarrollo económico de cada país y de la región.
Le siguió en el uso de la palabra Fredy Franco, presidente de la FESITRAUCAMC, quien se refirió a la profundización de las desigualdades preexistentes, expuestas durante la pandemia, específicamente en el sistema universitario el problema del acceso a la conectividad, ya sea por falta de recursos como por problemas regionales, la falta de instrumentos y espacios aptos para llevar adelante las clases, o bien asistir a ellas.
Al respecto, manifestó la urgente necesidad de que los sindicatos universitarios pongan en escena nuevamente la lucha por una mayor igualdad, a través de regulaciones que garanticen la estabilidad laboral, los derechos de trabajadores, la calidad académica y la inclusión social. De esta manera, se construirá una agenda social y política que ponga en el centro de la recuperación a quienes más lo necesitan.
Se sumaron mensajes de agradecimiento y saludos fraternales de compañeros que no pudieron estar presentes, entre ellos, de la titular del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, la Ciencia y el Deporte (SNTECD) de Cuba, Niurka González Oberá y del presidente de la Federación Mundial de Trabajadores Científicos (FMTC), Jean Paul Laine. Además, Fernando Rodal, presidente de la Confederación Educadores Americanos (CEA), envió un video en el que manifestó su alegría ante la organización de los sectores de la educación ya que “hace falta un esfuerzo integral de todos los niveles educativos en un trabajo colectivo con una mirada integral” y agradeció el aporte de la IESALC sobre los caminos a seguir en este tema.
Luego, hubo una ronda de intervenciones en las que los representantes de todos lo gremios hermanos de la región presentaron la situación en sus países. En todos los casos, dieron un fuerte mensaje de unión y de compromiso en reforzar el trabajo mancomunado por una educación universitaria de calidad, para el desarrollo social incluyente, y con justicia social para nuestros pueblos.
