Desde la Federación de Docentes de las Universidades vemos con mucha preocupación el anuncio realizado ayer por el gobierno nacional, mediante una resolución, que establece la creación del “Servicio Cívico Voluntario en Valores” a cargo de la Gendarmería Nacional y de inscripción voluntaria para jóvenes de entre 16 a 20 años. Esta iniciativa, que parece buscar el efecto electoral en ciertos sectores de la opinión pública, atropella el lugar y las funciones de las instituciones de la educación argentinas.
Como institución de la vida educativa de nuestro país, es nuestro deber alertar sobre el carácter regresivo de esta medida -absolutamente preocupante-, que destina recursos a ubicar a los jóvenes argentinos relegados del sistema educativo (generalmente, jóvenes en situaciones de vulnerabilidad) bajo la órbita de Gendarmería. Preocupa aún más que esta decisión se lleve a cabo mientras el área de Educación recibe un recorte presupuestario del 15,7 % en términos reales.
Este proyecto, que dice estar destinado a “formar a los jóvenes en valores democráticos y republicanos”, pretende hacernos olvidar que los jóvenes argentinos son sujetos de derecho, y merecen un sistema educativo de calidad, acompañado de políticas de inserción y oportunidades. Para garantizar este derecho, contamos con escuelas y universidades públicas y gratuitas, no con las fuerzas de seguridad.
Se trata de una provocación de Macri y Bullrich destinar esa «misión» a la Gendarmería Nacional responsable de los crímenes de Santiago Maldonado y Rafael Nahuel. El lugar para nuestros jóvenes es en escuelas y universidades dignas, con infraestructura adecuada. ¿No sería mejor aunar esfuerzos entre el Ministerio de Desarrollo y el Ministerio de Educación, organismos pertinentes en el tema? ¿Qué proyecto de país se pretende cuando se destinan los recursos que deberían ser de Educación a las fuerzas de seguridad?
Sin lugar a dudas, un país donde las instituciones educativas, los docentes, y el derecho a recibir educación son ninguneados por quienes hoy nos gobiernan. Ya lo dijeron los nuevos “expertos” en el tema: el jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad de la Nación, Gerardo Milman, sostiene que “todos los chicos deberían estar en las escuelas pero no somos Finlandia”, la Ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, declara que «Gendarmería es la institución más valorada en nuestro país, la número uno” y que ésta lo está incluso más que la educación pública. Esos son los dichos de quienes valoran más la represión que la educación pública.