Organizada por la Federación de Docentes de las Universidades (FEDUN), se realizó ayer la presentación del corto documental “Tareferos”, de Claudio Altamirano, un potente audiovisual de siete minutos de duración que da cuenta de una injusticia social: la que se consuma en los yerbales en la región del nordeste argentino.
En el evento, moderado por la secretaria Adjunta de la Asociación de Docentes de la Universidad de Buenos Aires (ADUBA), Betsabé Ollivier, Altamirano dialogó con el secretario general de la FEDUN, Daniel Ricci, y con el Dr. Javier Gortari, ex rector de la Universidad Nacional de Misiones, investigador y autor de libros y artículos sobre la cadena socioproductiva de la yerba mate.
Daniel Ricci agradeció a Altamirano por proponer la presentación de este corto en el ámbito de la FEDUN, y consideró que “es un material necesario para los docentes universitarios como herramienta para la visibilizar de la explotación y el trabajo infantil”, y agregó que “muchos consumimos alimentos sin saber lo que hay detrás, lo que pasa en el proceso de la producción”.
Agradeció también la presencia de Javier Gortari, especialista en la temática que “tiene mucho que aportar a esta charla”. “Es necesario que desde la universidad pública podamos visibilizar estas problemáticas, y aportar a la justicia social”.
Gortari felicitó a Altamirano y opinó que “filmar en donde ocurren los hechos le da un realismo y una crudeza que habla por sí mismo del compromiso del autor de este corto en la visibilización de esta injusticia social”.
Luego dio un panorama sobre la realidad de la mano de obra en el cultivo de la yerba mate, que se originó como un “cultivo de poblamiento», a través de las distintas colonias y entregas del territorio de Misiones. Se le llama industria madre, que tiene hijos y entenados”, en referencia a la extrema desigualdad entre los extremos del proceso productivo.
En este sentido, “en una punta se encuentra la alta concentración de capital en manos de las no más de 10 empresas que comercian el 90% de la producción de yerba mate”, y por el otro, los 15 mil tareferos (palabra de origen brasileño que viene de tarefa, que significa cosecha), y otros 15 mil pequeños productores. Esto nos da “un total aproximado de 30 mil familias, a 5 integrantes por familia son unas 150 mil personas (un 10% de la población de Misiones)” que padecen la explotación, “el trabajo infantil y las situaciones de extrema vulnerabilidad y abusos ligada a la producción de la yerba mate” que se muestra en el documental.
Después fue el turno del realizador del film, quien retomó las palabras de Ricci sobre la necesidad de que las universidades formen profesionales con un fuerte compromiso social, y aspiró a que este documental sea un aporte a “conocer las problemáticas que sufre nuestro país”, a la vez que instó a “poder construir de forma colectiva nuestro propio relato que se contraponga a los discursos creados por las Sociedad Rural” y otros grupos de poder.
Sobre el documental, Altamirano sostuvo que allí “está lo que siento pienso, digo y hago”, y intenta mostrar de manera elocuente las explotaciones de las familias que viven de la cosecha de yerba mate, sobre las cuales “el Estado debe intervenir y debe generar estrategias de resolución de estas situaciones de explotación. Si una familia, un padre y una madre tienen que ir a la tarefa, y con sus salarios pudieran vivir dignamente, tener su hogar, acceso a la alimentación sin problemas, todos los derechos que tenemos como seres humanos, no necesitarían que los niños y las niñas fueran. Es necesario atacar la causa de la explotación y la pobreza”.
En esa línea, el director del film opinó sobre los aportes de Gortari. “Escuchar el conocimiento profundo, específico, basado en años de investigaciones y estudio, es un orgullo. Y celebró poder compartirlo”, y agregó que “es un honor que la FEDUN pueda ofrecer a los docentes este material”.
Acceder a la charla completa a través del siguiente link:
Acceder al corto documental a través del siguiente link: