Desde la Federación de Docentes de las Universidades (FEDUN) manifestamos un enérgico repudio al nuevo aumento en el costo de la medicina privada, que con la suba prevista cerrará el año con un incremento del 114%.
Es inadmisible que mientras los aumentos en las negociaciones paritarias de los/as trabajadores/as en general y los/as trabajadores/as docentes de universidades públicas nacionales en particular van detrás de la inflación, los grupos concentrados de la economía -entre ellos las empresas de medicina privada- vienen superando la inflación y no tengan ningún límite en el aumento de sus márgenes de ganancias.
Desde la FEDUN sostenemos que no son los aumentos de los salarios los que generan inflación, sino los aumentos en los precios de los servicios y bienes de consumo que ofrecen las empresas, además la salud es un derecho humano y no una mercancía que se remarca a cada momento.
Rechazamos de plano que se favorezca a los formadores de precios en detrimento de los trabajadores. Estas acciones van claramente en contra de los objetivos y promesas asumidas por este gobierno en su ascenso al poder de accionar en la distribución de la riqueza en beneficios de los sectores trabajadores.
